Una nueva historia de amor. Mi máquina de coser y yo

El pasado verano mi hermana y mi mami me regalaron una estupenda máquina de coser. Fue algo que me hizo mucha ilusión. Desde peque siempre había visto a mi mami usarla y me apetecía mucho lanzarme a hacer mis propias creaciones. La probé entonces y mi madre me dió algunas nociones básicas, pero desde finales de septiembre no lo había vuelto a tocar.

Ese parón no ha sido por falta de ganas, que tenía muchas, sino más bien por falta de tiempo, ese bien tan preciado que tanto escasea. Al principio iba a necesitar a mi maestra cerca (mi mami) para que me guiara y me diera las pautas necesarias, pero entre su rotura de muñeca, el inicio del curso, las navidades y cien mil cosas más, no encontrábamos el momento, ¡hasta ayer! Ayer fue el día y, durante toda la tarde, mi maestra me dio un curso intensivo. Y os voy a contar el motivo, porque tampoco es que haya sido muy premeditado.

El pasado viernes compré a las enanas unas nuevas fundas nórdicas para sus literas. Después de mucho buscar encontré de casualidad, hojeando un catálogo, unas precisosas fundas de buhos en Carrefour que me gustaron y allá que fui a por ellas. Las vi en directo y no me lo pensé más, parecián de buena calidad y el precio era muy bueno, el único inconveniente era que las fundas de almohada erán un poco grandes y fue en ese instante cuando me acordé de que tenia máquina de coser.


Rápidamente pensé en una solución que, a priori, no parecía demasiado complicada para hacer con mi nueva amiga, con mi máquina de coser. Estrechar las fundas de almohada parecía sencillo y me lancé. Medí bien, corté, hilvané y me lancé a la aventura. Y… ¡voilá! Resultó aún mucho más fácil de lo que pensaba. Y entonces pensé ¿y con este trozo de tela que puedo hacer? Y me volví a lanzar y con ese trozo y algún retal más que tenía y gracias a las indicaciones de mi madre vestí las literas de las muñecas a juego con las literas de mis princesas. Y aquí tenéis el resultado.

 

Disfruté un montón haciendo toda la ropa de cama para las muñecas, pero aún disfruté más con la cara de mis hijas cuando vieron lo que les había hecho. Y os comunico que esta historia de amor con mi máquina de coser no ha hecho más que empezar… ¡Estoy segura de que continuará!

13 Replies to “Una nueva historia de amor. Mi máquina de coser y yo”

  1. Que bien te han quedado! Y lo de las cunas de las muñecas a juego con las camas esta genial!! Lo de usar la máquina de coser es mi asignatura pendiente, tengo un montón de ideas pero no termino de decidirme, a ver si cuando tenga algo de tiempo me pongo con ello.

  2. Necesito aprender urgentemente a coser con la máquina! Qué clase de marujista soy?!! XD

  3. Por cierto, te han quedado ideales! <3

  4. Pues lanzate porque es una chulada.
    ¡Muchas gracias por pasarte!
    🙂

  5. Seguro que sabes hacer cien mil cosas más mujer!!!
    😉

  6. ¡Muchas gracias por pasarte! 🙂

  7. Apruebo esa relación, y es más debería ser duradera. Mi madre ha sido modista y cose la mar de bien, pero aquí la mua tiene dos manos izquierdas si, si como lo oyes. Llevo años intentando que mi madre me enseñe, pero por tiempo y dejadez (todo hay que decirlo) lo hemos ido posponiendo. Este año me lo propuse porque de verdad que me da un coraje cierta prendas de ropa, que lo ves y no es más que un trozo tela cosido y lo que cuesta………..y me dije que de este año no pasa, ahora a ver si encuentro el momento.

  8. Lo que me he reído con tus dos manos izquierdas. Seguro que lo consigues.
    ¡Un abrazo y gracias por pasarte!

  9. ¡¡Es que eres una valiente!!
    Espero que esa historia de amor llegue a buen puerto y la disfruteis mucho y nos enseñes las cositas que vas haciendo para darnos mucha envidia (de la mala, ya sabes) y generarnos una nueva necesidad (que como tenemos pocas..) jejejeje
    Bss chula!!

  10. ¡Que chulo! La tela es una preciosidad, yo he comprado una parecida de búhos también para tapizar las sillas del comedor 🙂
    La verdad, las máquinas de coser son maravillosas y te permiten hacer cosas preciosas con tus propias manos. Además hay que ver la cara que se te pone cuando algo sale bien y encima lo has fabricado con tú, a mi me pasa muy a menudo jajajaja

  11. Eso espero y prometo iros contando mis avances 😉
    ¡Gracias por pasarte!

  12. Pues sí que molan, parece que lo estoy cogiendo el gustillo. Ojalá tuviese más tiempo…
    ¡Gracias por pasarte!

  13. […] fue, sin duda, la máquina de coser para niños que tanto tiempo llevaba pidiendo cada vez que me veía a mí con la mía. Muchos me habéis preguntado por la experiencia con ella por eso me he decidido a […]

Deja un comentario